Después de cinco meses sin contacto y una semana de rumores, la ex presidenta Cristina Kirchner y el gobernador bonaerense Axel Kicillof se reunieron finalmente este jueves por la noche para comenzar a delinear la estrategia electoral de cara a los comicios provinciales del 7 de septiembre. El encuentro, el segundo de la semana tras una llamada telefónica reciente, estuvo envuelto en versiones contradictorias que incluyeron negaciones oficiales y especulaciones sobre el lugar y la hora. “Se conformará un grupo integrado por representantes de los diferentes espacios para intentar construir una estrategia que confluya en listas conjuntas”, fue el único comunicado oficial que trascendió luego de la reunión.
La expectativa de la reunión era alta, ya que ambos dirigentes enfrentan presiones políticas y plazos ajustados: el cierre de alianzas se debe concretar antes del 9 de julio y las listas electorales presentarse para el 19 del mismo mes. Cristina Kirchner, quien acaba de anunciar su candidatura a diputada provincial por la tercera sección electoral —la más populosa y peronista de la Provincia— busca acelerar la unidad del peronismo bonaerense y definir los candidatos que competirán en las legislativas provinciales y nacionales. Desde hace meses, la relación entre el kirchnerismo y el gobernador estuvo marcada por una interna compleja, con tensiones entre la agrupación de Máximo Kirchner y Kicillof. Además, el mandatario bonaerense enfrenta la presión de intendentes que se oponen a un acuerdo con La Cámpora, complicando aún más el escenario de consenso.
Un elemento crucial en esta campaña es la situación judicial de Cristina Kirchner, condenada en segunda instancia en la causa Vialidad, lo que genera incertidumbre sobre su posibilidad real de presentarse a las elecciones. “Los senadores y diputados gozarán de completa inmunidad en su persona desde el día de su elección hasta el día en que cese su mandato… no podrán ser detenidos salvo en casos excepcionales”, indica el artículo 97 de la Constitución provincial, pero la Corte Suprema aún no fijó una fecha para expedirse sobre la causa, lo que añade un componente de tensión a la estrategia electoral. Mientras tanto, Cristina insiste en la necesidad de conformar un frente unido para enfrentar a La Libertad Avanza y el PRO, que ya están armando una alianza que amenaza con fracturar el predominio histórico del kirchnerismo en la provincia. En una reciente entrevista en C5N, la ex mandataria advirtió sobre el riesgo de una derrota contundente en septiembre que complicaría también la elección nacional de octubre.