El ministro de Economía, Luis “Toto” Caputo, salió a capitalizar el contundente resultado de las elecciones legislativas y la reacción positiva de los mercados en el inicio de la semana. A través de un extenso posteo en la red social X, el funcionario aseguró que la disputa interna que atraviesa la oposición es “sana” para el país y sostuvo que el triunfo de La Libertad Avanza dejó en evidencia “el riesgo kuka”. Para Caputo, el votante confirmó una tendencia que, según él, ya había quedado expuesta en 2019, cuando Mauricio Macri sufrió una derrota amplia en las primarias. “Si a alguno le quedaba alguna duda, ya no la hay”, expresó.
En su mensaje, Caputo argumentó que el país necesita dejar atrás de manera definitiva cualquier alternativa alineada con el kirchnerismo. “Si queremos graduarnos de país serio, que pueda atraer inversiones que den trabajo a nuestra gente, la alternativa política no puede ser más el kirchnerismo/comunismo”, sostuvo. Según su visión, las economías que logran atraer capitales estables se caracterizan por ofrecer previsibilidad política, algo que —dijo— la Argentina no podrá garantizar mientras exista la posibilidad de un regreso del peronismo kirchnerista al poder. “Ningún país serio ofrece esa volatilidad política. Y las inversiones en la economía real no sólo buscan rendimientos, buscan previsibilidad”, remarcó. En esa línea, aseguró que mientras esa opción continúe vigente “seguiremos estancados como país” porque los capitales elegirán otros destinos.
Caputo cerró su publicación con un mensaje dirigido directamente a los espacios opositores. “La oposición tiene dos años para construir una alternativa racional. Ojalá lo hagan y enterremos el pasado nefasto de los últimos 20 años de una vez por todas”, escribió. El posteo generó un rápido impacto: en menos de media hora superó las 10 mil visualizaciones, acumuló cerca de 4 mil “me gusta” y fue replicado por cientos de usuarios. La intervención del ministro se produce en un contexto marcado por una reacción inusualmente optimista de los mercados tras el triunfo libertario del domingo. El lunes, tanto en Buenos Aires como en Wall Street, las acciones argentinas registraron subas históricas y el dólar minorista llegó a caer casi 150 pesos antes de cerrar a la baja en $1.460. Además, el riesgo país vivió un derrumbe significativo, pasando de niveles superiores a los mil puntos a poco más de 600, un retroceso que los analistas atribuyeron a la lectura internacional del resultado electoral y al fortalecimiento del oficialismo.
En este escenario, el Gobierno buscó reforzar la idea de que la elección de Javier Milei —que se impuso con el 40,65% de los votos y aventajó por casi nueve puntos al kirchnerismo— constituye una señal de estabilidad política y económica. Para el oficialismo, el comportamiento de los mercados valida su diagnóstico y fortalece la proyección de las próximas reformas. Caputo, por su parte, aprovechó ese impulso para insistir en que la Argentina sólo podrá encarar un ciclo sostenido de crecimiento si consolida una oferta política ajena al peronismo y alineada con el proyecto libertario.
