En un clima de máxima tensión política, la Cámara de Diputados volverá a debatir este martes la puesta en marcha de la comisión investigadora sobre la estafa con la criptomoneda $Libra, promocionada tiempo atrás en la red X por el presidente Javier Milei. La iniciativa, impulsada por los bloques opositores, estuvo paralizada durante casi cuatro meses y se convirtió en un terreno de disputa entre La Libertad Avanza y sus aliados, por un lado, y el resto de las bancadas que exigen avanzar en el esclarecimiento de responsabilidades políticas.

El titular de la Coalición Cívica, Maximiliano Ferraro, fue una de las voces más firmes contra el freno oficialista. “Hoy vamos a poner fin al bloqueo del oficialismo y aliados sobre la investigación de lo ocurrido con $Libra. Se terminan las trampas y artimañas que desde el primer día montaron en el Congreso para evitar que se investiguen las responsabilidades políticas y el nivel de participación del presidente Milei y sus funcionarios más cercanos en esta estafa de criptomoneda”, advirtió en su cuenta de X. En el mismo sentido, cuestionó que “el oficialismo no ha contribuido en nada a favor de la transparencia ni para esclarecer cómo los estafadores lograron acercarse al presidente y hacerlo parte de un proyecto sin sustento ni antecedentes”.

La disputa se concentra en la integración de la comisión, que quedó empatada con 14 miembros del oficialismo y 14 de la oposición, lo que hasta ahora impidió elegir autoridades y dar inicio formal a la investigación. “Tres meses de obstrucción en los que fueron capaces de todo: armaron y desarmaron bloques para alterar la integración, impidieron votaciones e interpretaciones reglamentarias, trajeron al Jefe de Gabinete sin ninguna respuesta clara sobre el caso y, sobre todo, ausentaron a funcionarios implicados de las citaciones que les hicimos”, agregó Ferraro. Para destrabar el conflicto, el legislador presentó un proyecto que modifica la resolución original y propone que la presidencia recaiga en los bloques que concentren la mayor cantidad de diputados, lo que otorgaría el control a la oposición.

La presión sobre el oficialismo se intensificó a partir del emplazamiento votado en la última sesión, que obligó a convocar a las comisiones de Asuntos Constitucionales, presidida por Nicolás Mayoraz, y Peticiones, Poderes y Reglamento, encabezada por Silvia Lospennato. Allí, Unión por la Patria, Encuentro Federal, Democracia para Siempre, la Coalición Cívica y la izquierda buscarán avanzar con un nuevo dictamen que habilite el funcionamiento efectivo del cuerpo investigador. La propuesta incluye además que los plazos de trabajo —tres meses con la posibilidad de extender uno más para presentar el informe final— comiencen a regir recién una vez que se elijan las autoridades.

El oficialismo anticipa que seguirá resistiendo. Desde la creación de la comisión el 8 de abril, La Libertad Avanza logró bloquear su actividad mediante el armado de interbloques, interpretaciones reglamentarias y la falta de quórum. Incluso contó en algunas instancias con la colaboración del kirchnerismo, como en la sesión del 2 de julio, cuando diputados de Unión por la Patria se retiraron del recinto en medio de la discusión. Para Ferraro, esa estrategia llegará a su fin: “Con el proyecto que vamos a dictaminar hoy todo eso se termina, y al final de la historia estos tres meses serán recordados como una intentona de impunidad por parte de La Libertad Avanza”.