El foco de atención para las elecciones del 7 de septiembre en la provincia de Buenos Aires está puesto en la Tercera y la Primera Sección Electoral, que comprenden gran parte del conurbano bonaerense. Sin embargo, el peronismo también redobla esfuerzos en la Octava Sección, que incluye al municipio de La Plata, con casi 640 mil electores, un distrito históricamente adverso al PJ. Allí, el gobernador Axel Kicillof y el intendente Julio Alak confían en que la combinación de la gestión local y las internas en el espacio libertario pueden darles una victoria inesperada para la fuerza oficialista, Fuerza Patria.
El martes pasado, Kicillof y Alak dedicaron la jornada a inaugurar varias obras públicas en La Plata, con el claro objetivo de marcar un contraste con la gestión de Javier Milei y sus antecesores María Eugenia Vidal y Julio Garro. Entre las inauguraciones se destacó la incorporación de un carril en la calle 60, la pavimentación de la avenida 31 en José Hernández y la apertura de la nueva escuela especial 536 en Villa Elisa, un gesto que el gobernador vinculó directamente al veto presidencial a la ley de Emergencia en Discapacidad. “Mientras Milei veta la ayuda a los discapacitados, acá en la provincia inauguramos esta escuela especial”, afirmó Kicillof, y agregó: “El veto no es una cuestión meramente presupuestaria. Hay plata para sostener el negocio financiero. Eso marca las prioridades y a qué intereses responde”.
Con una gestión que exhibe apertura de nuevas instituciones educativas —“Con Vidal y Macri no se abrió una sola escuela con modalidad especial. Nosotros abrimos 20 nuevas y 14 edificios para educación especial”—, Kicillof también criticó la política social que definió como “ley de la jungla” y “sálvese quién pueda” que, dijo, propone la oposición. La movida del peronismo en la Octava se ve impulsada por la división y la baja imagen de La Libertad Avanza, con un enfrentamiento interno entre Karina Milei y Francisco Adorni, y la falta de visibilidad pública del ex intendente Garro, quien además enfrenta investigaciones por presunta corrupción.
El primer candidato a diputado provincial por Fuerza Patria es Ariel Archanco, referente del PJ platense y aliado de Máximo Kirchner, quien buscará aprovechar la fragmentación de la oposición. En tanto, el gobernador y Alak han distribuido al resto de los candidatos para capitalizar el cierre electoral y capturar a votantes indecisos. Desde el peronismo se calcula una diferencia de “cuatro o cinco puntos” a favor en la Octava, un resultado que hace meses parecía improbable.
No obstante, desde el entorno del gobernador reconocen un dilema estratégico: “Si la elección se nacionaliza y se polariza entre Milei y Cristina, estamos complicados”. Por ahora, Kicillof ha evitado mencionar a la ex presidenta en sus actos en La Plata, enfocándose en poner en agenda la gestión provincial frente al discurso libertario, en busca de consolidar su espacio en un distrito que no le ha sido favorable en legislativas desde 2005.