En un contexto de disputas internas entre los ministros Luis Caputo y Federico Sturzenegger sobre el futuro de organismos estatales, el Gobierno oficializó la fusión del Instituto de Prevención Sísmica (INPRES) y el Servicio Geológico Minero Argentino (SEGEMAR). La medida, anunciada por la cartera económica a cargo de Caputo, busca centralizar recursos y mejorar la eficiencia del Estado, en línea con la política de reducción del gasto público impulsada por el Ejecutivo.
Según el comunicado oficial, “la fusión permitirá centralizar capacidades técnicas, aprovechar infraestructura existente y potenciar el desarrollo de conocimiento aplicado, cumpliendo con el objetivo primordial del Gobierno Nacional de disminuir el sobredimensionamiento de la estructura estatal, mejorar su funcionamiento y reducir el gasto público”. El decreto 396, firmado también por el jefe de Gabinete Guillermo Francos y el presidente Javier Milei, formaliza la unificación de ambos organismos, que hasta ahora dependían respectivamente de la Secretaría de Obras Públicas y la Secretaría de Minería del Ministerio de Economía. Para el Ejecutivo, tanto el INPRES como el SEGEMAR compartían ámbitos de actuación vinculados a la geociencia, el estudio del subsuelo, riesgos geológicos y la prevención de desastres naturales, así como la formulación de estándares regulatorios.
La fusión responde a un informe del Ministerio de Desregulación, liderado por Sturzenegger, que reveló la existencia de 111 organismos desconcentrados y descentralizados dentro del Estado y propuso evaluar sus competencias para optimizar la estructura pública. La Secretaría de Economía también elaboró un documento que coincidió en la necesidad de fusionar y transformar varias áreas. En esa línea, se dispuso además que el Instituto Nacional del Agua (INA) pase a integrarse como unidad organizativa en la estructura de la Secretaría de Obras Públicas, “promoviendo la simplificación organizativa, una mayor eficiencia y un uso racional de los fondos públicos”, destacaron desde Economía.
Esta decisión se da en medio de una interna política que se evidenció con la propuesta de centralizar otros organismos clave como el INTA y el INTI, generando tensiones dentro del equipo económico. Fuentes oficiales intentaron minimizar la controversia, señalando que “no hay una pelea, Caputo conoce los cambios, pero puede haber alguna pulseada entre funcionarios intermedios”.
En paralelo, el Gobierno también disolvió dos fondos fiduciarios: el Fondo Fiduciario para Subsidios de Consumos Residenciales de GLP y el Fideicomiso Individual PPP Red de Autopistas y Rutas Seguras. La medida fue tomada tras un informe de la SIGEN que detectó falta de transparencia, ausencia de indicadores de gestión y documentación insuficiente en ambos fondos, elementos que comprometían su eficiencia y control, especialmente en aspectos relacionados con la prevención del lavado de activos.
Con estas medidas, el Gobierno busca una profunda reestructuración y racionalización del Estado para mejorar la gestión y el uso de recursos públicos en un contexto de ajuste y reformas.