Milei inauguró las sesiones ordinarias con un discurso de fuerte tono político y electoral

El presidente Javier Milei abrió las sesiones ordinarias del Congreso con un discurso de una hora y cuarto transmitido por cadena nacional, donde realizó un balance de su gestión, presentó los proyectos clave para el año y lanzó duras críticas a la oposición. Con un tono desafiante y con fuerte impronta electoral, el mandatario instó al Congreso a acompañar sus reformas, advirtiendo que, de no hacerlo, avanzará por su cuenta en la transformación del país.

“Hoy quiero aprovechar para mencionar algunas cosas sobre las que estamos trabajando”, expresó Milei en su discurso, aludiendo al proceso legislativo en el marco de la campaña electoral. “Imagino que esta zona se va a poner un poquito más violeta…”, ironizó señalando la bancada de La Libertad Avanza en la Cámara de Diputados. También lanzó duras críticas a la oposición, asegurando que muchos legisladores “se eligen a sí mismos antes que a los argentinos”. Afirmó que su Gobierno seguirá adelante con los cambios propuestos, incluso sin el respaldo del Congreso. “Pelearemos en el Congreso de la Nación, en las provincias y en los municipios, en las legislaturas y concejos deliberantes, en los medios analógicos y en las redes sociales, en la calle si así lo demanda la historia”.

Uno de los ejes centrales de su intervención fue la situación económica, donde arremetió contra el kirchnerismo y los sectores que cuestionan su plan de ajuste. “Desde abril la economía no para de crecer y ustedes, keynesianos, no pueden parar de llorar”, sentenció en referencia a los indicadores económicos. Además, insistió en su enfrentamiento con el gobernador bonaerense Axel Kicillof, a quien acusó de mantener una postura “abolicionista” ante la crisis de seguridad en la provincia. “Si quiere resolver el problema tiene dos alternativas: abandonar esa visión o correrse del camino y dejarnos resolverlo”, desafió.

Milei también enfatizó la necesidad de avanzar en una reforma del sistema judicial, endureciendo penas y bajando la edad de imputabilidad. “Necesitamos aprobar la ley de baja de la edad de imputabilidad para que quienes son lo suficientemente conscientes para cometer crímenes de adultos, paguen las consecuencias de sus actos como adultos”, argumentó, mencionando el caso de un menor de 14 años involucrado en un crimen en La Plata. Asimismo, exigió celeridad en la designación de jueces y fiscales, al tiempo que cuestionó a los legisladores por trabar sus nominaciones a la Corte Suprema.

Otro de los anuncios clave fue el envío al Congreso de un nuevo acuerdo con el Fondo Monetario Internacional. “Estamos avanzando en un acuerdo para terminar de sanear el balance del Banco Central y salir del cepo cambiario definitivamente durante este año”, sostuvo el mandatario, solicitando el respaldo del Legislativo en esta negociación. En la misma línea, adelantó su intención de impulsar una reforma migratoria más estricta, señalando que los extranjeros en situación transitoria deberían costear los servicios que utilizan. “Nuestra Nación ha sido generosa con los inmigrantes, pero otra cosa distinta es ser tomado de tontos”, afirmó.

El discurso de Milei dejó en claro que el año legislativo estará marcado por la tensión política y la contienda electoral. Con una oposición fragmentada y un oficialismo dispuesto a sostener sus reformas a cualquier costo, el Congreso se convierte en un escenario clave en la disputa por el rumbo del país.

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