El Gobierno anunció que, a partir de este martes, el plan Procrear dejará de existir “tal como se lo conoce”. Este programa, creado por decreto en 2012 durante el mandato de Cristina Kirchner, tenía como objetivo principal facilitar el acceso a la vivienda para los sectores de ingresos medios y bajos, ofreciendo créditos hipotecarios y subsidios. En su lugar, se implementarán nuevas medidas, como la autorización de “hipotecas divisibles” para proyectos inmobiliarios en desarrollo. El vocero presidencial, Manuel Adorni, comunicó esta decisión a través de la red social X, donde también destacó la “gran gestión” del ministro de Economía, Luis Caputo.
Aunque la noticia fue anunciada, no se brindaron más detalles inmediatos sobre la implementación de estos cambios, ya que el Boletín Oficial aún no había publicado la información al respecto. Los detalles adicionales sobre la modificación del plan Procrear y las nuevas regulaciones en el sector inmobiliario se esperan para el transcurso de este martes. Esta medida se suma a otras reformas anunciadas por el gobierno de Javier Milei, como la modificación del nombre del Gasoducto Néstor Kirchner, que pasó a llamarse Perito Francisco Pascasio Moreno, y la desregulación del servicio postal.
El plan Procrear había sido una de las iniciativas más relevantes del gobierno kirchnerista y fue relanzado en agosto de 2020 por el presidente Alberto Fernández con el fin de promover la construcción, refacción y ampliación de viviendas. En sus últimos años, el programa se había ampliado a nueve líneas de crédito, tanto hipotecarios como personales, con el objetivo de ofrecer soluciones habitacionales a familias de ingresos bajos y medios. Sin embargo, con la llegada de Milei al poder, el plan Procrear fue incluido dentro de los fondos fiduciarios, un conjunto de recursos de casi $3 billones que el actual presidente busca eliminar, ya que los considera parte de las “cajas negras” de la política.
El programa estaba bajo la coordinación de la Secretaría de Desarrollo Territorial, Hábitat y Vivienda, dirigida por Rodrigo Aybar, y su implementación dependía del Ministerio de Economía de Caputo. Con la desaparición del Procrear, se abre un nuevo capítulo en la política habitacional del país, que promete cambios sustanciales en la forma en que se brindan soluciones para el acceso a la vivienda.