En un discurso contundente ante la Asamblea Legislativa, el presidente Javier Milei describió la situación económica y social de Argentina como “el momento más crítico de su historia”. Cuestionó los últimos 20 años como un “desastre económico” caracterizado por el gasto público descontrolado, la emisión excesiva y una herencia devastadora para su gobierno.

El mandatario detalló la herencia recibida, destacando un déficit fiscal del 5% en el Tesoro y un déficit consolidado de 15 puntos. Señaló que la pobreza, producto de décadas de populismo, es el indicador más crudo de la crisis, criticando la corrupción en las organizaciones de izquierda que administran la ayuda social.

Milei también abordó temas como la situación de los jubilados, la creación de universidades como un negocio político y la falta de insumos en el sistema de salud. Denunció un Estado corrupto y diseñado para el beneficio de políticos, prometiendo una lucha contra la corrupción que afecta a todos los poderes del Estado. El discurso concluyó con un llamado a cuidar cada peso de los argentinos y un compromiso con la transparencia y la gestión eficiente del gobierno.