El Gobierno argentino informó a la Cámara de Diputados sobre sus planes de presentar “una reforma integral del sistema tributario” a lo largo de este año. Esta propuesta, respaldada por el presidente Javier Milei, el jefe de Gabinete, Nicolás Posse, y el ministro de Economía, Luis Caputo, se basa en criterios de simplificación, expansión de la base de contribuyentes y reducción de la presión fiscal. El anuncio fue parte del mensaje que acompañó el proyecto de modificación de la ley del Impuesto a las Ganancias, especificando que la implementación de la reforma está condicionada a lograr un superávit fiscal en 2024.

El documento emitido señala al Impuesto a las Ganancias como “el tributo de mayor progresividad del entramado fiscal argentino”. Además, fundamenta la propuesta de modificación de este impuesto en la necesidad de “recomponer los ingresos fiscales eliminados entre los meses de agosto y diciembre de 2023”. El texto destaca que la República Argentina enfrenta una grave crisis económica y fiscal, atribuyendo la situación a políticas fiscales adoptadas en décadas anteriores y medidas implementadas en los últimos meses de 2023 bajo la administración de Alberto Fernández.

El proyecto de ley enviado al Congreso busca restaurar los ingresos fiscales eliminados durante el último tramo de 2023, centrándose específicamente en el Impuesto a los Ingresos Personales, perteneciente a la cuarta categoría del Impuesto a las Ganancias. El documento subraya la progresividad del impuesto a las Ganancias, destacando su enfoque en las ganancias netas de los contribuyentes. Además, el proyecto contempla un capítulo referido al “Impuesto a los Ingresos Personales”, que se aplica a aquellos sujetos con capacidad contributiva suficiente, siempre respetando el principio rector de la progresividad.