En la recta final de la campaña y en medio de la disputa por la interpretación de los resultados de las elecciones legislativas de este domingo, Axel Kicillof lanzó un desafío directo al Gobierno nacional durante un acto en La Plata organizado por la CGT. Desde el escenario montado en la sede sindical de la calle 36, recientemente rebautizada José Ignacio Rucci, el gobernador bonaerense elevó el tono y buscó marcar posición frente al oficialismo libertario. “Vamos a ver si gana La Libertad Avanza o nosotros, el peronismo, el campo popular, Fuerza Patria, nuestro gobierno, la militancia, los laburantes, los estudiantes, las personas con discapacidad, los que defienden la soberanía. A ver quién gana”, exclamó ante un auditorio colmado de referentes gremiales. Desde el comienzo de su intervención, Kicillof insistió en que ya existe “una disputa interpretativa” sobre los resultados del domingo y cuestionó que “todavía no se ganó, no se perdió y ya se está discutiendo cómo hay que contar las cosas”, aludiendo a la pretensión del Gobierno de comunicar datos nacionales en una elección que se define en 24 comicios provinciales.
El mandatario también repasó momentos clave del año político para subrayar la diferencia entre las expectativas libertarias y los resultados obtenidos. Recordó el clima triunfalista expresado por Javier Milei en mayo, junio y julio, cuando el Presidente sostenía que iba “a pintar todas las provincias argentinas de violeta” y que contaba con “mayorías holgadas”. “Tenían mal el termómetro”, señaló Kicillof en referencia al desenlace de la elección bonaerense del 7 de septiembre. A partir de esa lectura, el gobernador volvió a desafiar al oficialismo al preguntarse “¿en cuántas provincias va a ganar La Libertad Avanza y en cuántas que van solos? Vamos a ver cuántas provincias pintan de violeta”, deslizando que el peronismo prevé un desempeño limitado del oficialismo a nivel nacional.
El acto, convocado para homenajear a José Ignacio Rucci en un nuevo aniversario de su asesinato, reunió a figuras de peso en el movimiento obrero y en el peronismo bonaerense. Sobre el escenario se ubicaron referentes como Héctor Daer, Hugo Moyano, Sergio Palazzo, Andrés Rodríguez y Cristian Gerónimo, acompañados por dirigentes políticos como Julio Alak, Mario Secco, Fabián Cagliardi y Jimena López, entre otros. La presencia de dirigentes sindicales se combinó con la interna del PJ, donde algunos sectores habían cuestionado la decisión de Kicillof de adelantar los comicios bonaerenses. En su discurso, el gobernador defendió esa estrategia al asegurar que “el pueblo estaba sufriendo y no estaba pintado de violeta. Ese hechizo se derrumbó”.
Con un tono más combativo, Kicillof apuntó en varios tramos contra la política económica del presidente Milei y del ministro Luis Caputo. “El Gobierno fracasa e improvisa para sostener el negocio de la timba”, afirmó, y fue aún más categórico al señalar que “si recurrir al FMI es un fracaso, pedirle rescate al Tesoro de los Estados Unidos es fracasar al cuadrado”. También lanzó críticas personales hacia Milei al sostener que “tiene una dificultad para pronunciar varias palabras, diría casi el diccionario entero, pero hay una que le cuesta muchísimo: democracia. Hay otra que le cuesta un montón: trabajo. Y hay otra imposible: industria”.
El clima de campaña impregnó toda la jornada y varios oradores aprovecharon para expresar su apoyo al gobernador de cara al futuro político. Tanto Julio Alak como Aníbal Rucci coincidieron en augurarle un camino hacia la presidencia, mientras que Hugo Moyano (hijo) celebró que Kicillof “tiene la misma estrategia que Perón en el 46”. Asimismo, los discursos sindicales también se enfocaron en la reforma laboral que el Gobierno anunció para después de las elecciones. “Les encomendamos el triunfo y la construcción de las mayorías parlamentarias para frenarla”, pidió Daer, mientras que Palazzo advirtió que “la tarea del movimiento obrero es ser el frontón de resistencia a las regresiones del derecho laboral”. La única voz femenina del acto, la de Jimena López, dejó un mensaje con perspectiva de género al afirmar: “En ninguna institución hay democracia sin mujeres”.





