En apenas cuatro días, el clima financiero cambió por completo: del pánico al entusiasmo. Este miércoles, tras nuevos mensajes del secretario del Tesoro de Estados Unidos, Scott Bessent, sobre los planes de apoyo a la economía argentina, el dólar sumó su tercera caída consecutiva, mientras las acciones y los bonos protagonizaron una jornada de fuertes subas. El funcionario norteamericano aseguró que su país “está listo para comprar bonos argentinos en dólares estadounidenses y lo hará cuando las condiciones lo justifiquen”. Además, adelantó que el Tesoro “está preparado para otorgar un importante crédito stand-by a través del Fondo de Estabilización Cambiaria, y hemos mantenido conversaciones activas con el equipo del presidente Milei para hacerlo”.
El tipo de cambio oficial abrió con una baja de $35 y se ubicó en $1.350 en las pantallas del Banco Nación, aunque luego se estabilizó en $1.360, unos $25 menos que la jornada anterior. En el mercado mayorista, el dólar perdió 2,3% y cerró en $1.337,50, en una rueda donde se destacó el incremento del volumen negociado y la aparición de divisas provenientes del agro. La baja de la tasa de interés del Banco Central —que pasó de 45% a 35%— fue leída por los operadores como un intento de la autoridad monetaria de poner “un piso” a la cotización mayorista, frente a la expectativa de un “aluvión de dólares” en las próximas jornadas.
El optimismo no se limitó al mercado cambiario. Los bonos soberanos cerraron con ganancias de hasta 6,3%, especialmente en los títulos de más largo plazo. En consecuencia, el riesgo país se desplomó 12% y descendió a 900 puntos básicos, un nivel que no se registraba desde antes de las elecciones en la provincia de Buenos Aires. En Wall Street, los ADRs argentinos llegaron a subir más de 9% durante la rueda y finalizaron con avances más moderados, de hasta 5%, lo que permitió borrar parte de las pérdidas acumuladas en las primeras semanas de septiembre. El índice Merval acompañó la tendencia alcista con una suba del 3,3%, en contraste con las bajas registradas en los principales índices de Nueva York, aunque aún acumula una caída superior al 9% en lo que va del mes.
En paralelo, la jornada cambiaria estuvo marcada por un fuerte aumento del volumen operado, que trepó a US$ 831 millones, impulsado por la quita total de retenciones al sector agroexportador y la participación activa del Tesoro nacional. “Las declaraciones juradas del agro para aprovechar las retenciones 0 sumaron US$ 4.180 millones. Es importante recalcar que esto debe liquidarse en las próximas 72 horas. Por lo tanto, en los próximos días, vamos a ver al Tesoro casi con seguridad comprando muchos dólares”, explicó Nicolás Copella, analista del Grupo IEB. Según el especialista, la expectativa es alcanzar un cupo de US$ 7.000 millones, con el Tesoro como principal comprador. “Hoy los rumores eran que el Tesoro habría comprado US$ 300 millones”, agregó Copella.
En este contexto, el Banco Central informó que no intervino en el mercado de cambios, en una jornada donde el optimismo desplazó al nerviosismo que dominó la plaza financiera apenas días atrás. El mensaje de respaldo de Washington y la reactivación del ingreso de divisas del agro parecen haber devuelto, al menos momentáneamente, la confianza a los mercados locales.
				
				

