La balanza comercial argentina continuó mostrando superávit en agosto, alcanzando los US$ 1.402 millones, según los datos difundidos por el Indec. Esta cifra representa la continuidad de una tendencia positiva que se extiende por 21 meses consecutivos, aunque marcó una disminución de US$ 473 millones respecto al mismo mes de 2024. El resultado se produjo en un contexto previo al fuerte avance del dólar que comenzó a registrarse en septiembre, y refleja la dinámica de exportaciones e importaciones en un mercado externo cada vez más demandante y volátil.
Las exportaciones sumaron US$ 7.865 millones, lo que significó un crecimiento interanual de 16,4%, impulsado principalmente por un aumento de 15,3% en las cantidades exportadas y una suba marginal de 0,9% en los precios. En contraste, las importaciones alcanzaron los US$ 6.463 millones, con un incremento del 32,4% interanual, explicado por un aumento de 43,3% en las cantidades y una caída de 7,3% en los precios. “El índice de términos del intercambio aumentó 8,9%, y reflejó una mejora en los precios relativos del comercio exterior. En el análisis por cantidades se destacó el incremento de las importaciones sobre el de las exportaciones”, señaló el informe del Indec, evidenciando un mayor dinamismo del consumo y la inversión interna.
El ministro de Economía, Luis Caputo, destacó los resultados y resaltó el acumulado del año: “En el año el superávit acumula US$ 5.071 millones”, subrayó, en medio de una jornada financiera marcada por volatilidad cambiaria. Entre los rubros de importación que mostraron mayor crecimiento se destacan los automotores de pasajeros, con un salto del 135,3% interanual hasta los US$ 514 millones, el nivel más alto desde 2018. Los bienes de capital subieron 51,9% hasta US$ 432 millones, mientras que los bienes de consumo avanzaron 47,6% y las piezas y accesorios para bienes de capital crecieron 19,4%. Por el contrario, se observaron descensos en combustibles y lubricantes, que cayeron 25,1% interanual, y en bienes intermedios, con una baja de 5,6%, mostrando que no todos los sectores acompañaron la tendencia expansiva del comercio exterior.
En conjunto, los datos reflejan un escenario mixto: mientras que el superávit persiste y acumula resultados positivos en lo que va del año, el incremento de las importaciones, especialmente en sectores estratégicos como automotores y bienes de capital, plantea nuevos desafíos para el equilibrio comercial y la política cambiaria en los próximos meses. La evolución de la balanza en septiembre y la respuesta del mercado frente al aumento del dólar serán clave para definir la trayectoria del comercio exterior argentino hacia fin de año.
				
				

