Fuerte castigo de los mercados a la Argentina: se desploman bonos y acciones ante la creciente tensión política y cambiaria

El clima político y económico volvió a golpear con fuerza a los activos argentinos. Este jueves, los bonos en dólares se hundieron más de 12%, las acciones que cotizan en Nueva York (ADRs) cayeron más de 10% y el índice Merval perdió un 9% medido en dólares. Los inversores internacionales reaccionaron con cautela frente al endurecimiento del escenario político interno y la persistente presión sobre el dólar. En consecuencia, el riesgo país, medido por el banco JP Morgan, se disparó casi un 24% y alcanzó los 1.453 puntos básicos, uno de los niveles más altos del año.

En lo que va de septiembre, este indicador acumula un salto superior al 70% y, en lo que va de 2025, muestra un incremento del 130%. Según analistas, detrás de este deterioro se combinan la incertidumbre sobre la sostenibilidad del programa económico del presidente Javier Milei y la falta de consensos políticos para avanzar con las reformas estructurales. A ello se suman el revés legislativo a los vetos presidenciales y los malos resultados electorales en la provincia de Buenos Aires, que reforzaron las dudas sobre la capacidad de gobernabilidad. En este contexto, las intervenciones del Banco Central —que vendió US$ 432 millones en dos jornadas para intentar contener al dólar— encendieron las alarmas del mercado respecto a la capacidad de pago del país.

El contraste con el resto del mundo fue evidente. Mientras los mercados internacionales se vieron impulsados por la rebaja de tasas de la Reserva Federal estadounidense, los activos argentinos se desacoplaron completamente. “La deuda emergente sube este año en promedio un 7%, un excelente año, mientras Argentina está totalmente desacoplada de estos movimientos”, señaló Gustavo Neffa, de Research for Traders. En el mercado accionario, las pérdidas fueron lideradas por YPF, que cayó más de 10% en Nueva York, seguida por los papeles bancarios y energéticos.

El impacto también alcanzó a la deuda en pesos. Según un informe de PPI, “en línea con la deuda en moneda dura, tanto la tasa fija como los bonos CER se derrumbaron. Los primeros cayeron en promedio 2,5% y 5% los segundos”. Además, las tasas internas de retorno (TIR) de los CER finalizaron en torno al 30%, mientras que las de las LECAPs se ubicaron entre 4% y 4,6%, las de los BONCAPs entre 3,8% y 4,8%, y las de los BONTAMs entre 3% y 3,5%.

El diagnóstico de los economistas coincide en que el Gobierno enfrenta una encrucijada compleja entre la falta de respaldo político y la escasez de divisas. La consultora 1816 estima que, hasta 2027, el país deberá afrontar vencimientos por más de US$ 34.000 millones. “¿Cómo sale el Gobierno de esta encrucijada? Con plata o con política. El problema es que la plata que necesita es de color verde. ¿Sacará algún conejo de la galera? ¿Podría recibir algún apoyo extra del ‘amigo’ Trump? Veremos”, plantearon desde Delphos, al tiempo que advirtieron que “si quisiera salir con política, debería cambiar la forma y el fondo”.

El economista Gabriel Caamaño Gómez, de Outlier, remarcó que “más allá de la foto de pánico que representó este jueves, hay una película que muestra un deterioro creciente de las expectativas”. Según explicó, los precios de los activos “ya venían cayendo” y sólo habían mostrado un leve repunte cuando Milei intentó acercarse a los gobernadores y a los votantes moderados. “Duró muy poquito”, reconoció. Para Caamaño, “al mercado le preocupa una situación monetaria cada vez más delicada, con un gobierno que no acumula reservas y ahora empieza a gastarse lo que le dio el Fondo”. Además, advirtió que “el mercado está viendo que el Gobierno se está quedando cada vez más solo, con menos apoyo legislativo y con los gobernadores parados en la vereda de enfrente”.