Karina Milei desistió de la cautelar por los audios filtrados y defendió la libertad de prensa

La secretaria general de la Presidencia, Karina Milei, presentó un escrito judicial en el que desistió de la medida cautelar que había solicitado para impedir la difusión de los audios en los que se la escuchaba hablar dentro de la Casa Rosada. En el documento, la hermana del Presidente aclaró que el contenido de esas grabaciones “no afecta a su intimidad, ni a la Seguridad Nacional”. De esta manera, dio por finalizado el reclamo iniciado semanas atrás, aunque insistió en que las grabaciones fueron obtenidas de manera ilegal.

El abogado de Milei, Santiago Viola, sostuvo que los audios difundidos “fueron obtenidos de manera ilegal, que apuntan a la desinformación y a una campaña malintencionada hacia la opinión pública”. Sin embargo, desde el entorno oficial explicaron que la funcionaria decidió “desistir de la cautelar porque no afecta la Seguridad Nacional ni la intimidad familiar”. Además, recordaron que el Ministerio de Seguridad ya presentó una denuncia penal para investigar la posible comisión de delitos vinculados a la obtención de esos materiales.

La presentación se realizó en el marco del recurso de revocatoria interpuesto por el empresario de medios Jorge Fontevecchia, titular del Directorio de NetTV S.A., quien había solicitado revisar la medida cautelar dictada por el juez Alejandro Marianello. En su escrito de siete páginas, Milei argumentó que el reclamo del empresario “no ha logrado acreditar, ni siquiera mínimamente, que haya tenido un gravamen concreto con la medida dictada”, y agregó que “ni el Sr. Fontevecchia ni tampoco el supuesto ‘medio de prensa’ Net T.V. mencionaron que tuvieran algún audio de quien suscribe”.

La funcionaria también manifestó su posición en defensa de la libertad de expresión. “Creo firmemente en la libertad de prensa, pero ese derecho no puede ser confundido con un derecho a desinformar o utilizar medios de comunicación como presión política o para desestabilizar un gobierno elegido democráticamente”, afirmó. En esa línea, sostuvo que en una democracia “deben convivir distintas opiniones, pero éstas deben estar basadas en hechos reales y no en operaciones efectuadas con real malicia cuyo único fin es el daño político y personal de una persona y su familia”.

Al justificar su decisión de retirar la acción judicial, Milei explicó que “la continuidad de la tramitación podría afectar, de alguna manera, la investigación penal antes mencionada”. En el texto, remarcó además que los audios “reproducidos en medios extranjeros no afectarían mi seguridad, ni los derechos de terceros ni la seguridad nacional, al menos con la información con la que se cuenta actualmente”. Por ese motivo, concluyó que su derecho “se encuentra debidamente resguardado en la investigación penal iniciada” y que, si hiciera falta, las medidas necesarias para su protección “serán dictadas en el marco de esa causa judicial”.

Finalmente, Karina Milei volvió a cuestionar el origen del material filtrado y subrayó que se trata de audios “manipulados y editados con la finalidad de crear una operación en contra de mi persona y de mi familia”. Según afirmó, esa manipulación “demuestra, una vez más, que no estamos ante un derecho de prensa y/o a informar ideas a través de la prensa, como establece nuestra Constitución Nacional”. Con su presentación, la funcionaria cierra la instancia judicial iniciada por la cautelar y deja el asunto en manos de la Justicia penal, que investiga la filtración.