Con el inicio de la segunda semana de trabajo de la Convención Constituyente que reformará la Constitución de Santa Fe, la comisión de Peticiones resolvió este lunes rechazar la impugnación presentada contra Alejandra “Locomotora” Oliveras, quien permanece internada en terapia intensiva tras sufrir un accidente cerebrovascular (ACV) a principios de la semana pasada. La decisión deja abierta la definición sobre el futuro de la banca de la ex boxeadora en el órgano constitucional, en función de su evolución médica.
El pedido de impugnación fue presentado por la diputada provincial y miembro de la Convención, Amalia Granata, quien argumentó que Oliveras “no tiene residencia en la provincia de Santa Fe”. Sin embargo, la comisión descartó este reclamo, apoyándose en certificaciones que acreditan la residencia de Oliveras, incluyendo títulos de propiedad e impuestos a su nombre, además de su vínculo de largo tiempo con la provincia. En diálogo con Aire Santa Fe, Ariel Sclafani, presidente del Partido Frente de la Esperanza y compañero de fórmula de Oliveras, afirmó que “vamos a tocar el tema con total seriedad y, si hay que reemplazarla, por lo que digan los médicos, lo haremos”, pero destacó que “esto se resolverá con sentido común y humano”. Además, confirmó que se mantiene en contacto permanente con la familia de Oliveras y que aguardarán “unos días prudenciales” para evaluar la situación clínica antes de decidir.
El parte médico difundido este lunes por el Hospital Cullen indica que Oliveras se encuentra “estable clínicamente, con evaluaciones neurológicas y monitoreo permanente”, aunque permanece en estado crítico y con pronóstico reservado. Ante esta realidad, Sclafani anticipó que, en caso de ser necesario un reemplazo, la candidata radical Verónica Colombo podría asumir la banca. “No creo que esté en el espíritu de quienes integramos la Convención apurar esta decisión, más aún en un momento tan sensible por la salud de Alejandra”, expresó. “En este tipo de situación hay que buscar un equilibrio y un respeto. Más allá de la política y los intereses, ante todo está el factor humano”, concluyó el dirigente.
Así, mientras la Convención Constituyente avanza en sus trabajos, el caso de Oliveras se mantiene como un foco de atención especial, donde las decisiones políticas deberán combinarse con la prudencia y la empatía frente a la delicada situación de salud de una de sus integrantes más emblemáticas.