Con una inversión acumulada de 2.200 millones de dólares, Pluspetrol e YPF lograron un nuevo avance estratégico en el desarrollo energético de Vaca Muerta. Se trata de la ampliación de la planta de procesamiento de gas en el yacimiento La Calera, que incrementó su capacidad operativa en un 20% y ya puede tratar hasta 14,5 millones de metros cúbicos diarios. Esta mejora llega justo a tiempo para responder a la alta demanda energética del invierno y consolida a La Calera como el tercer mayor yacimiento de gas no convencional de la cuenca neuquina.

El yacimiento, operado por Pluspetrol con YPF como socio, se encuentra en el corazón de Vaca Muerta. En la planta Central Processing Facility (CPF), se procesan además 4.800 metros cúbicos diarios de condensados, un subproducto que tiene múltiples usos industriales y representa un aporte importante al flujo de divisas del país. “Refuerza el flujo de divisas en un marco de actividad sostenible”, destacaron desde la empresa en un comunicado difundido tras la inauguración de las nuevas instalaciones.

La obra fue recorrida recientemente por el gobernador de Neuquén, Rolando Figueroa, acompañado por el presidente de YPF, Horacio Marín; el CEO de Pluspetrol, Claudio de Diego; y el country manager de Pluspetrol Argentina, Julián Escuder. Durante el recorrido, las autoridades destacaron la magnitud del desarrollo, que incluye 90 pozos productivos y un plan de inversión que desde 2022 ya superó los 2.200 millones de dólares. Solo en 2025, las empresas prevén desembolsar otros 700 millones de dólares para continuar la expansión.

La construcción y ampliación de la planta CPF movilizó a 1.900 trabajadores, demandó 6,5 millones de horas de trabajo, 13.000 metros cúbicos de hormigón y más de 4.700 toneladas de cañerías. Esta obra forma parte de la apuesta de Pluspetrol e YPF por posicionarse como protagonistas en la producción de gas y petróleo no convencional, clave para garantizar el abastecimiento energético del país y mejorar su balanza comercial.

En paralelo, Pluspetrol también avanzó en la consolidación de su presencia en Vaca Muerta tras la compra, a fines de 2024, de los seis activos que ExxonMobil operaba en la región. Entre ellos se destaca la adquisición de Bajo del Choique, una de las áreas con mayor potencial para la producción de shale oil. La operación, valuada en 1.700 millones de dólares, marcó un hito en la industria y refuerza la estrategia de crecimiento de la compañía en el país.