Un buque pesquero con bandera de Vanuatu fue interceptado por la Prefectura Naval Argentina tras ingresar a la Zona Económica Exclusiva (ZEE) del Mar Argentino para realizar pesca ilegal. Según informó la autoridad marítima, el buque Xinrun 579 había zarpado de un puerto en China y navegaba a baja velocidad dentro de las 200 millas náuticas, lo que evidenció las actividades ilícitas. “El trayecto que realizó entre las 15 y las 16:30 del domingo configuró una clara infracción a la ley N° 24.922”, indicaron desde la Prefectura.
El buque fue detectado por el guardacostas PNA GC-25 Azopardo a la altura del Golfo San Jorge, en una zona compartida por las provincias de Chubut y Santa Cruz. Tras abordar la embarcación, la Prefectura notificó a la tripulación sobre la infracción y labró actuaciones administrativas. Ahora, la Justicia Federal de Caleta Olivia y la Subsecretaría de Pesca y Recursos Acuáticos estarán a cargo del caso. El pesquero había iniciado su travesía en el puerto de Shidao, en China, y pasado por puertos de Corea, Singapur y Mauricio antes de llegar al Atlántico Sur, donde fue monitoreado desde mediados de diciembre.
La pesca ilegal, una problemática recurrente
El Mar Argentino, rico en recursos pesqueros, es un área frecuentemente acechada por buques extranjeros en busca de especies valiosas. Un caso reciente y emblemático fue el del pesquero Tai An, que en marzo de 2024 fue sorprendido pescando ilegalmente merluza negra, una especie protegida. A pesar de ser operado por la empresa argentina PRODESUR, el barco, de propiedad china, transportaba 142 toneladas de esta especie, valuadas en 4 millones de dólares.
Aunque el caso trascendió a nivel internacional, el desenlace no resultó ejemplar. La empresa responsable aceptó pagar una multa del 30% del valor de la carga y logró comercializarla en el mercado internacional, permitiendo que el Tai An regresara rápidamente a operar en la misma zona. “Es fundamental reforzar los controles en el Mar Argentino para evitar que estos casos sigan ocurriendo”, reclamaron desde organizaciones ambientalistas.
La necesidad de mayor control
La Prefectura Naval Argentina continúa enfrentando desafíos significativos en el monitoreo y la protección de la ZEE, especialmente ante embarcaciones que, como el Xinrun 579, ingresan desde puertos lejanos para aprovechar la riqueza ictícola del país. Con una vasta extensión marítima y limitaciones logísticas, los especialistas instan a una cooperación internacional más firme y a la implementación de sanciones más estrictas para frenar la pesca ilegal en aguas de jurisdicción argentina.