Lionel Messi sigue ampliando su influencia más allá del fútbol. El capitán de la Selección Argentina y actual jugador del Inter Miami CF ha dado un paso significativo en el mundo de los negocios al llevar su sociedad cotizada de inversión inmobiliaria, Edificio Rostower, a la Bolsa. La compañía, con sede en Barcelona, debutó en el mercado europeo Portfolio Stock Exchange, donde comenzó a cotizar con un precio de referencia de 57,4 euros por acción, lo que representa un valor total de 223,2 millones de euros. El futbolista ocupa el cargo de presidente de la firma, mientras que su esposa, Antonela Roccuzzo, es la vicepresidenta primera.

La mayoría de los activos de Edificio Rostower se encuentran en Catalunya, región en la que Messi vivió por más de dos décadas antes de su partida al Paris Saint-Germain en 2021. Entre las propiedades que forman parte de la cartera de la empresa destacan seis hoteles MiM, gestionados por la operadora Majestic en diversas localidades de España, como Andorra, Baqueira, Ibiza, Mallorca, Sitges y Sotogrande. A esta lista se suman otros bienes inmuebles, como un edificio de seis pisos en Barcelona, una nave en Sitges alquilada a una cadena de supermercados y un restaurante en Castelldefels. Además, la compañía posee propiedades en Sarrià-Sant Gervasi, París y Londres, según reporta el diario La Vanguardia.

El objetivo de Messi con esta movida en la Bolsa es optimizar y agrupar sus inversiones en el sector hotelero e inmobiliario, consolidando un negocio con gran potencial de crecimiento. La “socimi” (sociedad cotizada de inversión inmobiliaria) de Messi cotiza bajo el tícker ERTW y su principal actividad es la adquisición y promoción de bienes inmuebles para su alquiler. La estructura fiscal de las socimis es favorable, ya que tributan al 1% en el impuesto de sociedades, con la obligación de distribuir al menos el 80% de sus beneficios en dividendos. Además de Messi y Antonela Roccuzzo, el directorio de la firma incluye a Alfonso Nebot, quien gestiona el patrimonio familiar de Messi, y Ramón Adell, economista y consejero de Naturgy.

Este movimiento refuerza la visión empresarial de Messi, quien demuestra que, más allá de su carrera deportiva, está buscando consolidarse como un exitoso inversionista en el ámbito inmobiliario, aprovechando su popularidad y sus recursos para expandir su imperio empresarial.