El expresidente Mauricio Macri reaccionó este lunes al ultimátum de Javier Milei sobre la posibilidad de sellar un acuerdo electoral entre el PRO y La Libertad Avanza (LLA) para las elecciones legislativas del año próximo. A través de un mensaje en redes sociales, Macri expresó su postura de forma contundente, alineándose con la idea de un acuerdo, pero dejando claro que no aceptará “trampas al electorado”. “En función a lo dicho por el presidente Milei, ‘O vamos juntos en todos lados o vamos separados; trampas al electorado, no’, acuerdo, porque esa fue siempre mi posición”, sentenció el líder del PRO.
No obstante, Macri planteó cuatro condiciones para que esta alianza se concrete: “Poner todas las ideas sobre la mesa, cumplir con la palabra como nosotros hicimos este año, ser absolutamente transparentes con el electorado y, ante todo, cuidar la República”. Estas condiciones reflejan las tensiones que han surgido entre el PRO y La Libertad Avanza en los últimos meses, especialmente a raíz de las decisiones políticas tomadas por Milei y su entorno, que han excluido al PRO de algunos procesos clave.
El mensaje de Macri llega poco después de que Milei, en una entrevista con la revista Forbes, expresara que si no se lograba un acuerdo electoral en todo el país, LLA iría por su cuenta. “Me niego rotundamente a eso de que ‘en esta sección sí, en esta sección no’. Eso es hacerle trampas al electorado. O vamos juntos en todo (con el PRO), o vamos por separado”, afirmó el presidente. Además, en la misma entrevista, Milei reafirmó su postura de alinearse solo con quienes comparten sus ideales liberales, y descartó cualquier posibilidad de diálogo con los kirchneristas, a los que llamó “kukas”.
La presión de Milei se da en un contexto de rumores sobre la candidatura de Macri para las elecciones legislativas de 2025, específicamente para encabezar la boleta de senadores en la Ciudad de Buenos Aires, donde el exmandatario busca consolidar su liderazgo. A su vez, el jefe de Gobierno porteño, Jorge Macri, impulsaría la idea de desdoblar las elecciones, para que los legisladores porteños se elijan entre mayo y julio del próximo año. Aunque ambos bloques han trabajado juntos en el Congreso, las tensiones se han intensificado, especialmente por la falta de participación del PRO en las decisiones del Ejecutivo. Macri ha expresado su malestar por este “destrato casi permanente” hacia su espacio político, a pesar de ser un aliado clave en la aprobación de leyes durante este año.