La Corte Suprema de Justicia de la Nación ratificó por unanimidad la decisión de la instancia inferior que obliga a Cristina y Máximo Kirchner a enfrentar un juicio oral en el caso Hotesur-Los Sauces. Ambos están acusados de formar parte de una maniobra de lavado de dinero a través de las empresas familiares, vinculadas a operaciones con el empresario Lázaro Báez. El tribunal rechazó los planteos presentados por la defensa de la vicepresidenta, que intentaban evitar el juicio. Durante la investigación, la Justicia determinó que las empresas Hotesur, dedicada al rubro hotelero, y Los Sauces, inmobiliaria, fueron utilizadas como “pantallas para el blanqueo de activos”.
El 18 de septiembre de 2023, la Cámara de Casación Federal había ordenado la reapertura de los casos Hotesur y Los Sauces, unificando las causas, y estableció que tanto Cristina Kirchner como su hijo Máximo enfrentaran cargos por asociación ilícita, dádivas y lavado de dinero. Florencia Kirchner fue sobreseída en estos casos. En respuesta a esta decisión, el abogado Carlos Beraldi, defensor de los Kirchner, presentó un recurso extraordinario ante la Corte Suprema para intentar revocar la orden que exigía el juicio oral. Sin embargo, el tribunal presidido por Horacio Rosatti sostuvo que el recurso no cumplía con los requisitos procesales necesarios para ser considerado y ratificó lo resuelto por la Sala I de la Casación.
En su fallo, la Corte argumentó que los planteos de la defensa no ofrecían una argumentación sólida, sino que se limitaban a “aseveraciones genéricas”. Además, rechazaron la queja sobre la “gravedad institucional” planteada por Cristina Kirchner, recordando que “no toda decisión dictada en un caso de trascendencia es en sí misma trascendente”. De esta manera, el máximo tribunal despejó los obstáculos que los Kirchner intentaban imponer al juicio, dejando firme la resolución que dispone que ambos deberán presentarse ante el Tribunal Oral Federal 5 (TOF 5).
El caso Hotesur-Los Sauces investiga una serie de operaciones de lavado de dinero mediante las cuales las empresas de los Kirchner habrían actuado como intermediarias para el reciclado de fondos obtenidos a través de la obra pública. Se estima que a través de Los Sauces se blanquearon más de 30 millones de pesos y con Hotesur aproximadamente 80 millones de pesos. Los acusados incluyen a Lázaro Báez, Osvaldo Sanfelice, Víctor Manzanares y Romina Mercado, entre otros. Además de la acusación de lavado de dinero, Cristina Kirchner enfrenta cargos por dádivas debido a las operaciones comerciales que mantuvo con empresarios contratistas del Estado durante su mandato.