Este lunes, las autoridades de la Universidad de Buenos Aires (UBA) dieron una conferencia de prensa para reiterar su denuncia de desfinanciamiento por parte del gobierno de Javier Milei. Durante el encuentro, el rector Ricardo Gelpi criticó la falta de recursos y la intervención de la Sindicatura General de la Nación (SIGEN), calificándola como un ataque a la autonomía académica. Además, Gelpi confirmó que la UBA acudirá a la Justicia para intentar detener las auditorías de la SIGEN, al considerarlas una injerencia directa en la gestión universitaria. “Se ha desfinanciado y eso es obvio, la UBA está haciendo un esfuerzo enorme, como también pasa con el Conicet, que es una institución con la que estamos íntimamente ligados”, afirmó el rector.
En un comunicado oficial, la UBA rechazó la “intervención del Gobierno” a través de la SIGEN, acusando al Ejecutivo de querer controlar los contenidos académicos y la administración de la universidad. “Quiere convertir a la SIGEN en su caballo de Troya para arremeter contra el corazón del sistema universitario: la libertad académica. Quiere poder decidir qué saberes o disciplinas son valiosos, qué docentes pueden enseñar y qué alumnos tienen derecho a asistir a la universidad”, expresaron. Como respuesta, la universidad propuso una auditoría independiente que permitirá, según sus autoridades, garantizar transparencia ante la ciudadanía sin comprometer su autonomía. “Nunca la UBA se ha negado a hacer auditorías, de hecho, queremos que sean más siempre dentro del marco de las leyes”, señaló Matías Ruiz, secretario de Hacienda de la UBA.
Desde la SIGEN, sin embargo, respondieron que la intervención no afecta la autonomía universitaria y que buscan únicamente evaluar el uso de fondos públicos asignados a la UBA. Miguel Blanco, titular de la SIGEN, aseguró: “La autonomía universitaria no está en discusión, el tema es la transparencia en los fondos públicos que el Poder Ejecutivo asigna a las universidades”. Blanco también destacó que existen montos significativos pendientes de rendición en la UBA, por lo cual ven necesaria la auditoría. En sintonía, José Fretes, gerente de control de la SIGEN, afirmó que “tenemos derecho a auditar todas las universidades”, y explicó que este proceso requiere documentación y colaboración por parte de la institución auditada.
En el marco de este conflicto, el clima en la comunidad académica se tensa, y distintos sectores ya han organizado manifestaciones en apoyo a la UBA. La Asamblea Interfacultades de la UBA, junto con la Universidad Tecnológica Nacional y la Universidad Nacional de las Artes, convocaron a la Marcha Federal Universitaria para el 12 de noviembre, una movilización que será votada por otras universidades nacionales. Además, la Federación de Docentes de las Universidades y la Federación Argentina del Trabajador de Universidades Nacionales anunciaron un paro para este miércoles, coincidiendo con las protestas de los gremios de transporte.
