La decisión del Gobierno de reducir la plantilla de la ex Administración Federal de Ingresos Públicos (AFIP) en un 15% y ajustar los salarios de los altos cargos ha generado un fuerte rechazo gremial. Según el anuncio del lunes, el organismo pasará a llamarse Agencia de Recaudación y Control Aduanero (ARCA) y sufrirá un recorte de 3.155 empleos sobre un total de 22.000. Esta medida, que apunta a reducir los gastos del Estado, ya motivó una respuesta de UpsAfip, el gremio que representa al personal superior, cuyo secretario general, Julio Estévez, afirmó: “Tomaremos todas las medidas legales y gremiales que correspondan para defender los derechos de los trabajadores”. En respuesta inmediata, los empleados de la Aduana confirmaron un paro para este miércoles de 10 a 12.
El recorte anunciado por la administración de Javier Milei incluye a trabajadores que, según Presidencia, fueron contratados irregularmente durante el último mandato kirchnerista. Desde el Ejecutivo argumentan que la medida se enfoca en los empleados que ingresaron tras el decreto 426/2022, emitido durante la gestión de Sergio Massa en Economía, que restringió la contratación de nuevos empleados en la administración pública. La estrategia legal del Gobierno busca ampararse en esta normativa, analizando posibles despidos o la disposición de los trabajadores en “disponibilidad”, es decir, el pago del salario durante un año antes de decidir si son reubicados o indemnizados. Una fuente oficial explicó que “los abogados del Estado están evaluando el andamiaje jurídico para ver si a esa gente le cabe el despido directamente”.
Otro punto controvertido es la eliminación de la llamada Cuenta de Jerarquización, un ítem salarial específico para altos cargos de la ex AFIP. Este ajuste incluye el salario de la oficial del organismo, Florencia Misrahi, cuyo ingreso alcanzaba los $32 millones mensuales, muy por encima del promedio de los ministros, que ronda los $4 millones. Desde el gremio, Estévez aseguró que no permitirán modificaciones salariales en la planta de trabajadores: “No vamos a permitir que se toquen los salarios de los trabajadores de planta porque están amparados por la Constitución y los convenios colectivos”. Sobre los despidos, el titular de UpsAfip sostuvo que el organismo requiere más personal, no menos, advirtiendo que “hay 1500 bajas vegetativas por jubilaciones cada año”.
Además, Estévez calificó el anuncio como un “show político” y subrayó la necesidad de “reforzar la planta de personal” para asegurar una recaudación eficiente. “No entendemos bien el show político de este tipo de anuncio, pero creemos que el Gobierno va a entrar en razones y vamos a mantener el equilibrio fiscal sin atacar al único ente recaudador del país”. Advirtió también que para alcanzar la recaudación que el presidente Javier Milei pretende, “necesitamos que la AFIP sea reforzada, no atacada”.
