El mercado inmobiliario en la Ciudad de Buenos Aires comienza a mostrar claros signos de recuperación tras años de estancamiento. Durante agosto de 2024, se registró la mayor cantidad de operaciones de compraventa de los últimos siete años, alcanzando un nivel que no se veía desde agosto de 2017, cuando se concretaron cerca de 6.000 escrituras. Según el Colegio de Escribanos de la Ciudad de Buenos Aires, en agosto se realizaron 5.297 operaciones, lo que representa un incremento del 28,1% respecto al mismo mes del año anterior, consolidando una suba del 7,1% en comparación con julio.

El monto total de las transacciones también evidenció un importante crecimiento, alcanzando los $515.023 millones, lo que implica un aumento del 287,4% interanual. El valor promedio de las operaciones se situó en $97.229.203, equivalentes a unos 98.985 dólares según el tipo de cambio oficial promedio, registrando un alza del 202,4% en pesos y del 3,4% en dólares respecto a agosto de 2023. Esta tendencia positiva está generando expectativas entre los actores del sector inmobiliario, quienes apuntan a un posible círculo virtuoso impulsado tanto por la recuperación de los créditos hipotecarios como por el blanqueo de capitales que se inició en abril.

El incremento en las operaciones con créditos hipotecarios es otro de los factores que da impulso al mercado. Aunque las cifras aún están lejos de los niveles alcanzados durante el boom de los créditos UVA en 2017 y 2018, los números comienzan a recuperarse. En agosto, se formalizaron 416 escrituras con hipoteca, lo que representa un aumento del 133,7% en comparación con el mismo mes del año pasado. En lo que va del año, se han registrado 1.265 operaciones con hipoteca, un 31,6% más que en 2023.

Mali Vazquez, directora ejecutiva de la Cámara de Desarrolladores Urbanos (CEDU), sostuvo que “a partir del 1 de octubre comenzará a verse el impacto en el sector ya que los que depositaron hasta el 30 de septiembre pueden retirar el dinero a partir del 1 de octubre”, haciendo referencia a la extensión del plazo del blanqueo de capitales, que se prolongó hasta el 31 de octubre. Este factor, junto con la reactivación del crédito, podría generar un impulso adicional en el último trimestre del año.

Por su parte, Jorge De Bártolo, presidente del Colegio de Escribanos de la Ciudad, señaló que “agosto fue el mejor mes de los últimos 75 meses”, y destacó el impacto del crédito hipotecario en el mercado. “Si bien las cifras aún son bajas, hubo un salto de casi el 300% en apenas dos meses, lo que alentará las operaciones encadenadas y confiamos en que esto se transforme en un círculo virtuoso”. Además, De Bártolo mencionó que hay un creciente interés en las escribanías sobre el blanqueo, con consultas de personas que buscan regularizar pequeños montos para invertir en propiedades o ayudar a sus hijos mediante donaciones.

Con estos indicios de recuperación, el sector inmobiliario porteño parece estar en camino de consolidar su repunte tras años de caída en las ventas, impulsado por el acceso al crédito y las nuevas oportunidades que surgen con el blanqueo de capitales.