Mientras el Gobierno argentino sigue pidiendo “paciencia” al mercado con respecto a la eliminación del cepo cambiario, se encuentra en plena colaboración con el sistema financiero para desarrollar la infraestructura necesaria que permita realizar pagos en dólares con la misma facilidad que se realizan actualmente en pesos. Esta medida se enmarca en la estrategia para facilitar una transición fluida hacia un entorno económico sin restricciones cambiarias.
La semana pasada, Luis Caputo anunció que las cuentas CERA vinculadas al blanqueo de capitales serán dotadas de tarjetas de débito, permitiendo así realizar pagos con dólares sincerados. Esta medida inicial es solo el comienzo de un esfuerzo más amplio por parte del sistema financiero para extender esta opción a todos los pagos de la economía. Actualmente, la posibilidad de pagar en dólares con tarjetas plásticas está limitada a transacciones en el exterior, pero se busca que esta opción esté disponible también en el mercado doméstico.
Por otro lado, las fintechs están colaborando con el Banco Central para diseñar desde cero un sistema que permita a las billeteras virtuales efectuar pagos y transferencias en dólares. Las aplicaciones no bancarias, conocidas oficialmente como Proveedores de Servicios de Pagos (PSP), están vinculadas a una Clave Virtual Uniforme (CVU) que facilita la interoperabilidad con el resto del sistema financiero mediante transferencias inmediatas y pagos por código QR. Paula Arregui, COO de Mercado Pago, subrayó la necesidad de introducir CVU en moneda extranjera para permitir que los dólares “fluyan” libremente dentro del mercado doméstico.
Las conversaciones con el Banco Central han estado en curso desde principios de año, y se están resolviendo aspectos técnicos para implementar las CVU en dólares. Existen dos opciones sobre la mesa: convertir las actuales CVU en pesos en “bimonetarias” o crear nuevas CVU específicamente en dólares. En ambos casos, el objetivo es que las CVU en moneda extranjera funcionen de manera similar a las cuentas bancarias en dólares actuales, permitiendo a los usuarios enviar y recibir dinero, realizar pagos y gestionar saldos.
Mientras tanto, las marcas de tarjetas, los bancos y los procesadores de pagos están ajustando los detalles técnicos para permitir pagos y transferencias inmediatas desde cuentas bancarias en dólares. La idea es que, en un futuro cercano, los consumidores puedan elegir pagar en dólares o pesos en los comercios según la moneda en la que tengan fondos disponibles. Una fuente del sector financiero ilustró este punto con un ejemplo: “Si compras una gaseosa y el comerciante te dice ‘son $1.200 o US$ 1’, podrías pagar en dólares si tienes dólares en tu cuenta, simplemente pasando la tarjeta de débito.”
Mastercard, por su parte, está trabajando en una solución para habilitar pagos en pesos y dólares en el país con tarjetas emitidas en Argentina. Según la empresa, “estamos en conversaciones con el regulador y los diferentes actores del ecosistema de pagos para habilitar esta opción en todos los productos: débito, crédito y prepago”, destacando que el débito será el primero en estar disponible, mientras que los pagos con crédito y tarjetas prepagas requerirán cambios normativos adicionales.
