La Cámara Argentina de Distribuidores y Autoservicios Mayoristas (CADAM) emitió una advertencia este domingo sobre los efectos inflacionarios que podrían derivarse de los recientes aumentos en las tasas municipales en diversos municipios del país. La organización alertó que estos incrementos se trasladarán inevitablemente a los precios que deben pagar los consumidores, agravando la ya delicada situación económica que enfrentan las pymes del sector mayorista. Este pronunciamiento se suma a una advertencia similar realizada por la Asociación de Supermercados Unidos (ASU) días antes.
En su comunicado, CADAM destacó la preocupante caída en las ventas mayoristas de productos de primera necesidad, como alimentos, bebidas, artículos de limpieza y perfumería, que según el último informe del INDEC, descendieron un 9,77% en junio en comparación con el mismo mes del año anterior. “Y mientras el consumo no repunta, en diferentes municipios del país se dispararon las tasas municipales”, indicó la cámara. Ante esta situación, CADAM aseguró que “esos aumentos se trasladarán a precios”, haciendo hincapié en que los márgenes de ganancia en el sector son ya extremadamente reducidos, y que “ya no se puede seguir sacrificando rentabilidad” sin poner en riesgo la continuidad de las empresas.
En su reclamo, CADAM señaló ejemplos de impuestos que consideran injustificados, como la obligación de plantar un árbol por ordenanza municipal y luego pagar una contribución forestal, entre otros gravámenes que calificaron como “modalidades de recaudación municipal que abruman a las pymes”. Estos costos adicionales, según la organización, no solo impactan en la rentabilidad, sino que también desincentivan la inversión en un contexto económico ya de por sí adverso.
A pesar de las críticas, la cámara también expresó su agrado por la reciente decisión del gobierno nacional de eliminar el cobro del derecho de autor por reproducir música y películas en ámbitos privados. No obstante, aprovecharon para insistir en la necesidad de suprimir otros aportes obligatorios, como los destinados al Instituto Argentino de Capacitación Profesional y Tecnológica para el Comercio (INACAP), que calificaron de ilógicos e innecesarios. “Resulta ilógico mantener este aporte, que no le representa ningún beneficio al aportante ni al trabajador, si decide no capacitarse”, afirmó CADAM en su comunicado.
El mensaje de CADAM encuentra resonancia en las preocupaciones expresadas por la ASU, que también ha criticado los aumentos “exorbitantes” en las tasas municipales, especialmente en distritos de la provincia de Buenos Aires y el Conurbano. En la misma semana en que representantes de los supermercados se reunieron con el ministro de Economía, Luis Caputo, para discutir la reducción del impuesto PAIS y su impacto en los precios al consumidor, la ASU advirtió sobre el impacto negativo de estas cargas tributarias. “La Asociación de Supermercados Unidos contempla con preocupación y alarma el incremento que a nivel de tributos provinciales y municipales se está dando en los últimos meses”, subrayaron, citando como ejemplo el alza de la alícuota del 6% por la Tasa de Seguridad e Higiene en el municipio de Lanús.
Ambas organizaciones coinciden en que la combinación de altos tributos, tanto a nivel municipal como provincial, pone en riesgo la supervivencia de muchas empresas en el sector y agrava la crisis inflacionaria que afecta al país, un problema que, según afirman, solo puede empeorar si no se toman medidas correctivas urgentes.
