El ministro de Seguridad de la Ciudad de Buenos Aires, Waldo Wolff, volvió a lanzar duras críticas contra el gobernador de la provincia de Buenos Aires, Axel Kicillof, tras un nuevo hecho de inseguridad en el conurbano bonaerense. Esta vez, la víctima fue un oficial de la Policía de la Ciudad que sufrió dos ataques violentos en un mismo día, lo que desató la indignación del ministro.

A través de su cuenta en X (anteriormente Twitter), Wolff relató el caso de un oficial que, estando de franco en su casa en Glew, fue víctima de un intento de robo. Un grupo de delincuentes irrumpió en su vivienda, lo que llevó al policía a enfrentarse a tiros con ellos para proteger a su familia. Aunque los asaltantes lograron huir, el oficial sufrió una herida superficial en el pecho y fue atendido por el SAME.

El enojo de Wolff se intensificó cuando, después del primer incidente, otro grupo de delincuentes atacó a los agentes de la Ciudad que habían sido enviados para brindar asistencia al oficial y su familia. “Está difícil”, comentó irónicamente el ministro en su publicación, haciendo alusión a la creciente inseguridad en el conurbano bonaerense.

En su mensaje, Wolff señaló que “11 de los últimos 12 policías de la ciudad caídos en cumplimiento del deber fueron asesinados en la PBA”. Además, subrayó que en el 36% de estos casos, los responsables continúan prófugos y que, en los demás, aún no se ha logrado una condena. “Si cuando matan a un policía no hay resolución del caso, imaginen qué le queda al ciudadano de a pie”, escribió, en un intento de evidenciar la gravedad de la situación.

El funcionario también hizo un llamado directo a Kicillof, enfatizando la necesidad de una colaboración más estrecha entre las distintas jurisdicciones para abordar la seguridad en el Área Metropolitana de Buenos Aires (AMBA). “Es imposible una provisión integral de seguridad en el AMBA con actitudes y políticas tan dispares y opuestas desde la conducción de las distintas jurisdicciones. Kicillof, cuando quiera y pueda, necesitamos abordar juntos este tema. Es hora. Es con orden”, agregó.

El ataque al oficial en Glew no es un hecho aislado. Hace apenas dos semanas, Juan Manuel Castelli, otro oficial de la Policía de la Ciudad, fue asesinado en Lomas de Zamora cuando dos delincuentes intentaron robarle mientras se dirigía a su trabajo. Este crimen generó una fuerte reacción de la Ciudad contra Kicillof, con el alcalde Jorge Macri y Wolff criticando duramente la gestión de seguridad en la provincia.

Castelli, que hubiera cumplido 42 años en septiembre, estaba casado y tenía dos hijos. Trabajaba en la Alcaldía 12 de Saavedra y cada día se trasladaba desde Burzaco hasta su puesto en la Ciudad de Buenos Aires. El día de su muerte, fue interceptado por delincuentes que, al intentar robarle, le dispararon dos veces, causándole la muerte debido a un paro cardiorespiratorio.

Estos episodios de violencia contra efectivos de la Policía de la Ciudad en el conurbano bonaerense han exacerbado las tensiones entre las administraciones de la Ciudad y la Provincia, revelando la necesidad urgente de una coordinación más efectiva en la lucha contra la inseguridad en la región.