Jubilados Pierden Poder Adquisitivo Pese a Ajustes por Inflación, Advierte Informe del IARAF

En medio de los preparativos del Congreso para debatir una nueva fórmula de movilidad jubilatoria, un informe reciente del Instituto Argentino de Análisis Fiscal (IARAF) revela un preocupante deterioro en el poder adquisitivo de los jubilados, a pesar de los ajustes mensuales por inflación implementados desde abril. Según el informe, los jubilados que perciben el haber mínimo, incluso con el bono adicional, experimentaron una significativa pérdida de ingresos en comparación con los valores de 2017.

El análisis del IARAF indica que los jubilados que reciben la jubilación mínima cobraron en junio de 2024 un total de $276.913, mientras que en 2017, ajustado a moneda de junio de 2024, el haber mensual promedio fue de $370.009. Esta diferencia representa una reducción de más de $93.000, o un 25% menos del poder adquisitivo en comparación con hace siete años. Esta situación afecta a más de la mitad del padrón previsional.

Por otra parte, aquellos jubilados que perciben tres haberes mínimos también han sufrido una notable disminución en sus ingresos. En 2017, su haber mensual promedio, ajustado a moneda de junio de 2024, era de $1.110.000. Sin embargo, en junio de 2024, estos jubilados recibieron $620.793, marcando una pérdida de $489.000 o un 44% menos en su poder adquisitivo.

“Dado el actual esquema de ajuste mensual, si la inflación se mantiene relativamente constante, los haberes reales se estabilizarían en estos valores actuales, obviamente muy por debajo de los del año 2017. Un aspecto clave que el gobierno debe resolver en el corto plazo es qué dinámica le va a dar a los bonos compensatorios”, señaló Nadin Argañaraz del IARAF. Agregó que “el crecimiento real del haber es menor que la pérdida de valor generada por la licuación del bono en caso de que se mantenga fijo en $70.000. Este tema del bono es muy significativo. Es clave lo que el gobierno decida hacer en julio”.

Hasta mayo, la inflación acumulada fue del 71,9%. Con un incremento estimado del 5% en junio y un 4% en julio, se espera que la inflación alcance un 87,7% en los primeros siete meses de 2024. En contraste, debido al congelamiento del bono, los haberes mínimos y por debajo del mínimo aumentarán entre un 71,3% y 77,7%, quedando por debajo de la inflación esperada para el mismo período y sin ninguna recuperación significativa desde la caída registrada desde 2017.

El impacto de la inflación también afecta a otros jubilados. Los jubilados docentes verán un incremento acumulado del 79,4%, los docentes universitarios un 67,3%, y los de Luz y Fuerza un 64,4%, todos con ajustes trimestrales. En contraste, los haberes sin bono han tenido una mejora del 8% en comparación con la inflación.

Argañaraz mencionó que “la Cámara de Diputados sancionó un proyecto que implica, entre otras cosas, mejorar un 7,2% los haberes reales. El Presidente de la Nación ha manifestado que va a vetar cualquier proyecto que ponga en riesgo el equilibrio fiscal. La sostenibilidad a futuro es la clave”. Destacó que sería ideal que el Congreso sancione cambios en los gastos o ingresos que aseguren que el aumento del gasto no tenga un impacto negativo en el resultado fiscal.

“Bajo la condición del equilibrio fiscal, la sociedad debe definir un mecanismo que garantice que los jubilados que aportaron durante su vida activa puedan al menos recuperar el poder adquisitivo del año 2017 y que se mantenga de manera sostenida. No hay mucho tiempo para la discusión”, concluyó.

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