En una demostración de fuerza, organizaciones gremiales y sociales vinculadas a las dos CTA y la Unidad Piquetera (UP) iniciaron una marcha hacia Plaza Congreso en Buenos Aires, interrumpiendo la avenida de Mayo y generando cortes parciales en la avenida Rivadavia, entre la calle Paraná y la avenida Callao. Este masivo acto forma parte del paro y movilización convocados por la CGT, que comenzó a las 12. Diversos grupos, incluyendo las dos CTA, la UP, la UTEP, la CCC, y el Movimiento Evita, entre otros, ocuparon la avenida Rivadavia, dejando solo un carril para el tránsito.
El despliegue de seguridad fue significativo, con un cordón de efectivos de la Policía Federal y la Policía de la Ciudad vigilando la concentración. Asimismo, un contingente de la Prefectura Naval Argentina y la Policía Bonaerense bloqueó una de las subidas del Puente Pueyrredón desde Avellanada hacia la Capital Federal desde las 11. Este operativo se llevó a cabo en respuesta a la presencia de una extensa columna de sindicatos, incluyendo camioneros, Uocra y Smata, así como diversos movimientos sociales que buscaban cruzar hacia la Ciudad de Buenos Aires.
Desde temprano, trabajadores y militantes de la Unión de Trabajadores y Trabajadoras de la Economía Popular (UTEP) se congregaron en la Plaza de los Dos Congresos como preludio a la movilización vespertina en rechazo al proyecto de ley “Bases” y el DNU 70/2023. El ambiente festivo se apoderó de la plaza, con banderas, bombos y pasacalles que identificaban a las distintas organizaciones sindicales presentes. Afiliados a sindicatos como Camioneros, Uocra y UPCN fueron los primeros en llegar, mientras que la movilización también contó con la participación de grupos del MST y del Partido Obrero, formando una multitud alrededor de un escenario frente al Congreso Nacional. El Gobierno implementó un amplio operativo de seguridad, destacando la presencia de camiones hidrantes, carros de asalto y motos en diversos puntos estratégicos.