En un contexto de fuerte confrontación política en Argentina, el Frente de Izquierda Unidad (FIT-U) ha anunciado un plan de lucha para enfrentar las medidas del gobierno, liderado por el presidente Javier Milei. Con el objetivo de “derrotar” las iniciativas gubernamentales, los cinco diputados del FIT-U, encabezados por Myriam Bregman, Nicolás del Caño, Romina del Plá, Alejandro Vilca y la reciente adhesión de Christian Castillo, están preparando acciones tanto en el Congreso como en las calles.
El FIT-U, crítico de la llamada ley ómnibus y del reciente Decreto de Necesidad y Urgencia (DNU) que desregula la economía, busca expresar su rechazo en el Parlamento y frenar estas medidas. Christian Castillo, uno de los diputados del FIT-U, subrayó: “Vamos a expresar el rechazo a la ley ómnibus en su totalidad que establece un cuasi Estado de sitio. Y en lo que hace al DNU queremos plantear que se constituya la bicameral y sesione el 23 de enero para rechazarlo e impedir que se consolide una autocracia en nuestro país.”
El FIT-U argumenta que el Gobierno no cuenta con el respaldo necesario para aprobar la reforma integral de la ley ómnibus, destacando que “nunca se ha hecho una modificación de 300 leyes. No hay ninguna necesidad y urgencia. Tenemos que derrotar el plan del Gobierno”. Esta postura ya ha generado tensiones en el Congreso, con denuncias de arbitrariedad en la designación de presidencias de comisiones.
Además de su acción parlamentaria, el FIT-U confía en la movilización popular como un elemento clave para enfrentar las medidas de ajuste, la ley ómnibus, el DNU y los despidos en curso. Aunque respaldan el paro nacional convocado por la Confederación General del Trabajo (CGT) para el 24 de enero, manifiestan desconfianza hacia las centrales obreras y planean marchar de manera independiente, expresando un polo más combativo.
El Frente de Lucha Piquetero, compuesto por 20 organizaciones, busca organizar una jornada de lucha el 20 de enero junto a otras entidades políticas, sindicales y piqueteras. Anticipando el escenario del 24 de enero, advierten sobre la posibilidad de un “régimen mucho más autoritario con más represión y policías en las calles impidiendo que la gente pueda movilizar.”
En paralelo a estas acciones, el FIT-U presenta un proyecto para declarar la emergencia laboral en la Ciudad de Buenos Aires, buscando revertir despidos y garantizar la estabilidad laboral en la administración pública. La legisladora Celeste Fierro subrayó la necesidad de convocar a sesiones extraordinarias en la legislatura para abordar estos temas, señalando la ausencia de sesiones desde el 10 de diciembre.