En un contexto de reconfiguración política y con el desafío de consolidar una estrategia opositora frente al Gobierno de Javier Milei, diversos sectores del peronismo argentino están impulsando la figura de un gobernador para encabezar el Partido Justicialista (PJ) en el próximo período. La propuesta de establecer una “mesa política horizontal” que defina la estrategia opositora ha sido ventilada por referentes justicialistas en las últimas horas, marcando un intento de asumir un nuevo rol opositor en el escenario político nacional y consagrar liderazgos renovados.

El gobernador de La Rioja, Ricardo Quintela, dio el primer paso al proponer una “amnistía” con el objetivo de reunir a referentes de diversos sectores en una “gran mesa horizontal”. En esta instancia, se buscaría la participación de gobernadores, legisladores nacionales, la CGT y movimientos sociales para coordinar acciones de oposición ante medidas consideradas “regresivas”, como el DNU de desregulación económica y varios puntos de la ley ómnibus impulsada por el oficialismo.

La posibilidad de renovación en las filas del PJ también alcanzaría a la figura del actual titular del partido, el expresidente Alberto Fernández. Entre las opciones, se plantea la idea de que “un gobernador tome la presidencia” del Consejo Nacional del PJ, lo que implicaría convocar a la Mesa de Acción Política de esa fuerza. Se especula sobre la falta de “vocación” de Axel Kicillof, actual mandatario bonaerense, para liderar el PJ nacional, abriendo la puerta a otros gobernadores justicialistas que podrían asumir un rol destacado.

Además, en la búsqueda de consolidar un liderazgo sólido, el exministro de Economía y líder del Frente Renovador, Sergio Massa, emerge como una figura que podría sumar acciones en esta etapa de reconfiguración partidaria. Mientras tanto, el peronismo ha acordado desplegar una estrategia opositora en múltiples frentes, incluyendo acciones judiciales y parlamentarias. Gobernadores, como Quintela, ya han recurrido a la Corte Suprema en contra del DNU, mientras la CGT ha obtenido una cautelar contra aspectos laborales del mismo decreto.

En el ámbito bonaerense, el peronismo busca una renovación que trascienda la conducción de Máximo Kirchner, referente de La Cámpora y actual líder del espacio en la provincia, sumando el respaldo de intendentes no solo del PJ, sino también de sectores como el “vecinalismo”. Guillermo Britos, intendente de Chivilcoy, se posiciona como un respaldo potencial para Axel Kicillof en este proceso de reconfiguración interna. El peronismo enfrenta el desafío de consolidar liderazgos y estrategias que le permitan ejercer una oposición efectiva en un contexto político marcado por las decisiones del Gobierno de La Libertad Avanza (LLA).