Este jueves, líderes de la Unión Cívica Radical (UCR) expresaron su rechazo al reciente Decreto de Necesidad y Urgencia (DNU) anunciado por el presidente Javier Milei, calificándolo como “inválido” y cuestionando su capacidad para sustituir al Congreso. Martín Lousteau, presidente de la UCR, destacó que el contenido del mega DNU incluye propuestas tanto interesantes como irrelevantes, pero subrayó la necesidad de un análisis detallado por parte del Congreso. Lousteau propuso reemplazar el DNU con una ley espejo votada por capítulos y convocar a sesiones extraordinarias para un tratamiento urgente.
La diputada Mariela Coletta, también de la UCR, criticó fuertemente el DNU, argumentando que “no puede reemplazar al Congreso” y acusó a Milei de imponer medidas sin diálogo. Aunque reconoció la necesidad de cambios en Argentina, Coletta afirmó que el camino no debería ser a través de decretos, sino mediante sesiones extraordinarias que promuevan el consenso y protejan la institucionalidad. Otros dirigentes radicales, como Karina Banfi, se mostraron cautelosos, anunciando que analizarán detenidamente el DNU y buscarán una posición unificada entre los legisladores.
La Juventud Radical (JR) de la Ciudad de Buenos Aires se sumó al descontento, calificando el decreto como “sin necesidad ni urgencia”. En un comunicado, la JR acusó a Milei de dejar a la juventud y a los ciudadanos vulnerables a merced de los privilegiados al derogar leyes que protegen los derechos de los inquilinos, la venta de empresas estratégicas y la regulación de precios. La JR llamó a la UCR a honrar su palabra en el Congreso y en las calles, defendiendo a los sectores vulnerables y oponiéndose con criterio a medidas que consideran perjudiciales para el país. La Mesa Nacional de la UCR también señaló que el DNU tiene aspectos positivos y preocupantes, instando al presidente a convocar sesiones extraordinarias para debatir detalladamente las propuestas en el ámbito correspondiente del Parlamento y evitar incertidumbre constitucional.