La candidata presidencial de Juntos por el Cambio (JxC), Patricia Bullrich, ha dejado claro su enfoque en reformar las leyes laborales en Argentina, y no duda en tomar medidas drásticas si el Congreso no respalda sus proyectos. En una entrevista con Alejandro Fantino en radio Neura, Bullrich manifestó su disposición a recurrir a decretos de necesidad y urgencia (DNU) si enfrenta resistencia política y sindical. La candidata argumentó que estas reformas son esenciales para proteger a las pequeñas y medianas empresas (pymes) y eliminar regulaciones que considera obsoletas.

Bullrich hizo hincapié en la urgencia de cambiar ciertas leyes laborales que, a su juicio, obstaculizan el crecimiento de las pymes y aumentan los costos de las empresas. En particular, destacó la necesidad de eliminar multas que incrementan las indemnizaciones por despido, lo que, según ella, desincentiva la contratación de personal. Además, cuestionó duramente el sistema judicial laboral al afirmar que está influenciado en exceso por los sindicatos, haciendo que los empresarios rara vez ganen juicios laborales.

La candidata también se centró en la regulación de la actividad del gremio de camioneros, señalando leyes anticuadas que imponen restricciones innecesarias en la industria del transporte. Mencionó que algunas normas impiden a una persona que carga un camión bajar la carga por sí misma, lo que aumenta los costos operativos. Además, criticó una regla que prohíbe a los camiones regresar con cargamento diferente, lo que, según ella, aumenta los gastos de los transportistas. Bullrich dejó en claro que está decidida a abordar estos problemas y a crear un entorno laboral más favorable para las empresas.

En cuanto a la atención médica a extranjeros en Argentina, Bullrich planteó un enfoque más estricto. Sugirió que los extranjeros que buscan atención médica no urgente, como una operación de apéndice, deberían pagar por los servicios o contar con un seguro de salud extranjero. Sin embargo, aclaró que esta política no se aplicaría a los residentes extranjeros en Argentina y que se trataría de una cuestión de reciprocidad. Bullrich enfatizó que las urgencias médicas siempre serían atendidas, pero argumentó que las cirugías planificadas deberían ser costeadas por los pacientes extranjeros para no cargar a los contribuyentes argentinos con los gastos.

Por último, Patricia Bullrich planteó una propuesta relacionada con los estudiantes universitarios extranjeros en Argentina. Sugirió que aquellos que cursen una carrera en una universidad pública deberían comprometerse a quedarse en el país durante al menos tres años después de graduarse para ejercer su profesión. Bullrich argumentó que esto permitiría a Argentina beneficiarse de la inversión en educación que realiza en estos estudiantes, ya que consumirían y contribuirían a la economía nacional después de su graduación.

La posición de Patricia Bullrich sobre estas cuestiones fundamentales de política laboral, atención médica y educación plantea un enfoque claro y decidido en caso de que gane las elecciones presidenciales. La candidata de Juntos por el Cambio está dispuesta a utilizar decretos de necesidad y urgencia para impulsar cambios en las leyes laborales si no encuentra apoyo en el Congreso, y busca una mayor reciprocidad en la atención médica a extranjeros y en la educación universitaria. Su visión de un gobierno proempresarial y orientado al mercado promete cambios significativos en el panorama político y social de Argentina si llega al poder.