En el marco del juicio oral y público que investiga el asesinato de Horacio “Chupete” Benavides, estudiante de abogacía y militante peronista en septiembre de 1976, el exministro de Gobierno de la provincia de Buenos Aires durante la última dictadura militar, Jaime Lamont Smart, ha solicitado su absolución ante el Tribunal Oral Federal número 2 de La Plata. La tarde de hoy marcará la determinación de los jueces en este crucial proceso judicial que también involucra a dos expolicías acusados del crimen.
En sus últimas declaraciones antes de conocerse el veredicto, Smart enfatizó que “no hay ningún escrito ni nadie que vincule a Smart con el accionar policial”. Asimismo, el exfuncionario remarcó que los jueces del TOF2 no deberían basarse en sus condenas anteriores por delitos de lesa humanidad, alegando que dichas condenas no deberían influir en el veredicto actual.
Smart se esforzó en destacar que no tenía control sobre la policía provincial, sino que esta estaba bajo el mando de las autoridades militares. Enfatizó que en este juicio no se ha mencionado su nombre y que la normativa de 1974 que establece la dependencia de la policía del Ministerio de Gobierno no le incrimina. Insistió en la falta de pruebas suficientes en su contra.
Además de Smart, los exagentes de la policía bonaerense Walter Ale y Juan Risso también enfrentan acusaciones en este caso. La querella y la fiscalía han solicitado penas de prisión perpetua para Ale y Risso, alegando su participación en el grupo de tareas responsable del asesinato. Para Smart, quien ya acumula cuatro condenas a perpetua, la misma pena ha sido solicitada, considerando su rol como autor mediato del crimen debido a su posición como ministro de gobierno de facto en la provincia.
La Unidad Fiscal también ha pedido medidas reparatorias para la familia de la víctima y ha instado a los diarios El Día de La Plata, Clarín y La Nación a rectificar la información estigmatizante sobre el caso publicada en ese momento, en la que se presentaba a la víctima como un “jefe subversivo”. La hermana menor de la víctima, Natalia Benavides, expresó la importancia de este juicio para la reconstrucción personal y social, subrayando la necesidad de justicia que ha persistido a lo largo de los años.
El asesinato de Benavides, quien militaba en la JUP y estudiaba en la Universidad Nacional de La Plata, sigue siendo un doloroso recordatorio de la violencia perpetrada durante la dictadura cívico militar. El estudiante de 22 años fue asesinado en 1976 y su memoria perdura como un símbolo de la lucha por la verdad y la justicia en Argentina. La audiencia se puede seguir en vivo a través del portal La Retaguardia.