El interbloque de senadores nacionales del Frente de Todos emitió un comunicado el domingo en el que rechazó el accionar de la empresa Telecom, que amenazó al directorio del Ente Nacional de Comunicaciones (Enacom) con acciones legales si se aprueba una resolución que permitiría el ingreso de un nuevo competidor al mercado de telefonía celular.
En el comunicado, el interbloque del Frente de Todos condenó estas maniobras que buscan paralizar el funcionamiento del ente regulador y controlar a aquellos que deben tomar decisiones que a veces no agradan a poderosos grupos empresarios. Destacaron que Telecom, donde el Grupo Clarín tiene intereses económicos y clara influencia política, envió cartas documento al vicepresidente del Enacom y a los representantes del Congreso Nacional en el directorio, advirtiéndoles sobre las consecuencias legales que podrían enfrentar por su participación en esta decisión.
El comunicado también hizo referencia a acciones pasadas en las que se observó un manejo impúdico por parte de al menos un sector de la justicia, mencionando el escándalo de Lago Escondido, donde jueces, fiscales, un funcionario porteño y ejecutivos del Grupo Clarín participaron en una excursión financiada por la corporación mediática. Estos hechos revelan un doble estándar por parte del grupo empresarial, que se opone a la libre competencia cuando sus propios intereses económicos o poder real se ven amenazados.
En el comunicado, se advierte que estas prácticas atentan contra la vida democrática en sociedad y se cuestiona el impacto que tienen en los ciudadanos comunes, quienes ven cómo empresas ejercen una presión casi mafiosa sobre actores políticos y públicos con el fin de alcanzar sus objetivos, poniendo en riesgo bienes e incluso la libertad. También se plantea la preocupación sobre la relación cercana entre ciertos grupos económicos y sectores de la justicia, dispuestos a cumplir cualquier encargo sin respetar las normas básicas ni el debido proceso.
En resumen, el interbloque del Frente de Todos rechaza enérgicamente las amenazas de Telecom al directorio del Enacom y denuncia la presión indebida ejercida por poderosos grupos empresarios en el ámbito de la comunicación. Además, advierte sobre las consecuencias negativas que estas prácticas tienen para la democracia y el normal funcionamiento de las instituciones.