La Reserva Federal de Estados Unidos (FED) inició hoy una reunión de dos días del Comité Federal de Mercado Abierto (FOMC) en Washington para decidir si aumentar la tasa de interés de referencia. El objetivo de esta posible subida sería combatir la inflación, la cual ha aumentado significativamente durante el último año. Actualmente, el rango de la tasa de interés se encuentra en 4,75% a 5%.
La mayoría de los analistas de Wall Street descartan que la FED decida un nuevo aumento de 25 puntos básicos, lo que llevaría el indicador a un rango de 5% a 5,25% en los próximos meses. En su lugar, se espera que la FED mantenga la tasa de interés actual hasta fin de año.
La atención de los inversores se centra en las perspectivas que trazará la FED para los próximos meses y en los indicios que pueda proyectar el presidente del organismo, Jerome Powell, durante la conferencia de prensa del miércoles. Los economistas estiman que Powell probablemente insinuará que la FED se está acercando a una pausa en sus aumentos de tasas, aunque no enviará una señal clara de que la subida de esta semana será la última de la FED. En cambio, es posible que Powell haga hincapié en que podrían ocurrir más aumentos de tasas si la inflación se mantuviera persistentemente alta, muy por encima de la tasa objetivo del 2%.
A pesar de la reciente crisis bancaria que llevó al colapso del First Republic Bank durante el fin de semana, todo indica que la FED continuará enfocada en combatir la inflación y dejará de lado esta crisis. Los próximos pasos del banco central, después de esta semana, se ven empañados por la incertidumbre y una mezcla de señales contradictorias en cuanto al estado de la economía. Si bien el mercado laboral se mantiene resistente y ha mantenido la tasa de desempleo cerca de los mínimos de 50 años durante meses, la contratación se ha desacelerado y las ofertas de trabajo han disminuido, lo que genera preocupación.