El presidente de la Comisión de Presupuesto de la Cámara de Diputados, Carlos Heller, atribuyó la subida del dólar a un “ataque especulativo” que “no se puede desvincular de la política”, en una entrevista con Radio 10 este miércoles. Según el diputado del Frente de Todos (FdT), el clima de desestabilización política que se viene generando desde el año pasado es propicio para la especulación y los movimientos financieros que se están produciendo. Heller señaló que “nadie especula con lo que abunda, ni con la perspectiva de que puede haber un problema”.
Heller considera que el país no necesita un cambio de rumbo, sino profundizar en el camino que se está siguiendo, ya que un cambio podría llevar a consecuencias negativas. “Si cometemos el error de elegir como alternativa un cambio de rumbo, la vamos a pasar muy mal. El camino es por acá”, remarcó el legislador oficialista. Además, Heller destacó la importancia de la renegociación de las metas con el Fondo Monetario Internacional (FMI) y que “se observan gestos de flexibilidad” de ese organismo respecto de la Argentina.
El diputado del FdT señaló que “todas las noticias indicaban, sabiendo que la Argentina no es un paraíso, que se estaban tomando medidas concretas y que apuntaban a mejorar la situación”. Heller también mencionó que “desde el atentado a la Vicepresidenta (Cristina Fernández de Kirchner) todo lo que pasó alrededor” está vinculado con este clima, según el legislador, quien se preguntó: “¿O los que asaltan el Capitolio (Estados Unidos) o el Planalto (Brasil) son loquitos o responden a una orga que mueven fuerzas en determinada dirección para generar desestabilización?”.
En definitiva, Heller considera que la Argentina necesita rediscutir las metas para que sean cumplibles, no a costa de hacer políticas de ajuste y que este proceso de recuperación económica es importante para consolidar muchos indicadores. Asimismo, destacó que el ministro de Economía, Sergio Massa, obtuvo compromisos de créditos de distintos organismos internacionales y se comenzó a liquidar el nuevo dólar de incentivo exportador, que se interrumpió cuando apareció el rumor de la devaluación.