El Ministerio de Economía, Sergio Massa, anunció la creación de un programa de compensación para productores afectados por la influenza aviar. Este programa, que tiene como objetivo reforzar la prevención de la enfermedad, forma parte de una inversión de más de $1.000 millones para el circuito comercial. Massa aclaró que la enfermedad no afecta el proceso de producción ni el consumo. En una conferencia de prensa, acompañado por el Secretario de Agricultura, Ganadería y Pesca, Juan José Bahillo, la Presidenta del SENASA, Diana Guillen, el vicepresidente del SENASA, Rodolfo Acerbi y el Jefe de Gabinete de la SAGyP, Juan Manuel Fernández Arocena, se explicó que se destinaron $909 millones para el refuerzo presupuestario y una compensación económica para la reposición de aves afectadas.
En la conferencia, Bahillo detalló que se mejorará la presencia y el control territorial de la influenza aviar y se invertirá en equipamiento de laboratorio, insumos de laboratorio, equipamiento para movilidad, equipamiento informático, gastos de difusión, recursos humanos y control territorial. Además, anunció una compensación económica para la reposición de aves afectadas. Por su parte, Guillen destacó la importancia de detectar rápidamente las aves afectadas para poder proceder con las medidas de control necesarias. También recordó a la población que no deben manipular animales muertos o que presenten sintomatología extraña, sino que deben avisar al SENASA para que retire los animales y proceda a hacer los análisis correspondientes.
El Ministerio de Salud emitió recomendaciones sobre medidas de cuidado ante la confirmación de casos de aves con influenza aviar en el país. El Ministerio informó que aún no se ha reportado transmisión interhumana sostenida del virus y que el riesgo de transmisión continúa siendo bajo. Aunque el consumo de carne aviar, huevos y sus subproductos no presenta peligro para la población, se recomienda evitar todo contacto con aves muertas o enfermas, así como el contacto directo con aves silvestres. Además, se recomienda el lavado frecuente de manos con agua y jabón o el uso de desinfectantes a base de alcohol.